En el contrato se señalaba  que la debía hacer igual que la de Susinos del Páramo, que no era obra suya pues se dice que «os fue mostrada». La había de entregar ocho días antes de la Pascua de Resurrección del año 1560.

Tendría un valor de 38000 a 40000 maravedis, pagandole la plata que pesase y la hechura a tasación de dos personas, una nombrada por cada parte y en discordia de estos un tercero puesto por el contratane.

Para empezarla a hacer le dieron 10000 maravedís en el mismo acto y le prometieron otros 10000 para San Juan de Junio del mismo año. El resto de la plata se la pagarían a la entrega de dicha cruz.

Alberto Lopez García

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